El Gobierno de Castilla-La Mancha pondrá en marcha a partir del próximo 1 de septiembre una convocatoria específica de ayudas por importe de 6,5 millones de euros para la instalación de energías renovables térmicas.
Los objetivos que se persiguen son, por un lado, impulsar la transición energética en empresas y en la administración y, por otro, disminuir la emisión de gases de efecto invernadero para combatir el cambio climático.